Mi primer vuelo aerobático

La primera vez que experimenté el “vuelo aerobático” fue una experiencia maravillosa y el pump de adrenalina me hizo sentir ¡invencible! ¿Te imaginas? subes a un avión, vuelas alto y estás entre las nubes. Parece que tocas el cielo. Te llevan al límite (fuerza 4G que se siente como cae el peso de tu cuerpo 4 veces sobre de ti y si no sigues las instrucciones te puedes desmayar). Y luego un poco de relax al experimentar la fuerza de gravedad CERO (y tu cuerpo flota ligero). A veces experimentas nauseas y hay quien llega a vomitar durante su vuelo (nada de que preocuparse, los pilotos van preparados con una bolsita para eso en caso de que lo necesites). También llevas puesto un paracaídas (just in case, aunque siempre te dicen que los pilotos son experimentados (todos son ex-militares) y que no lo vas a necesitar) y te enseñan como utilizarlo en caso de emergencia.

Voltean el avión, de derecha a izquierda, en circulo, hacen piruetas, dejan caer el avión como si se fuera a estrellar contra el piso y así sin avisar retoman el poder y lo salvan (estrategias que enseñan a pilotos profesionales para saber maneobrar el avión en situaciones de emergencia). ¡Que impactante!

Esa experiencia me hizo regresar a mi día a día recargada, con emoción y adrenalina en mi cuerpo. Me abracé a esa sensación para lograr muchos objetivos que tenía para los siguientes meses y ¡fue un año de locura en el trabajo! Muy bueno.

Ahora que es la tercera vez que hago este vuelo, me hizo pensar a como nos sentimos como emprendedores/empresarios:
Fuerza 4G: cuando sientes todo el peso encima de todo el trabajo que tienes que hacer, de las cuentas que tienes que pagar, de los pendientes, de las recriminaciones de tus amigos, de tu desgaste. La presión, el estrés… ¡es como sentir la fuerza 4G sobre tu cuerpo! O como hacer el “spin” donde el avión le quitan el poder del motor y lo hacen “como caer” (literal lo dejan caer –o stalling–) y ves el terreno enfrente de ti, estás a punto de estrellarte y ¡pum! el piloto toma las riendas del avión, pone el motor a todo lo que da y sube el avión de nuevo a las nubes. WOOOOOW.

Pero luego llega ese punto donde ya vas más seguro en tu camino, la experiencia se va juntando y tu vas tomando fuerza y seguridad. Llega el momento en el que “te relajas” un poco, así como la fuerza 0G y te sientes flotando y sientes ligero tu cuerpo.

Eso no quiere decir que en cualquier momento no pueda llegar otra pirueta de la vida (de tu avión) y vuelvas a sentir la fuerza 4G o la sobrepases (no sé una 5G o 6G y ¡pum! te desmayes). Es como cuando “fallas” o te “caes” o simplemente “te das por vencido” ante algo y tu cuerpo y mente “descansan”, se dejan ir. No se si me explique. El caso es que debes de saber que a pesar de las piruetas de la vida, de querer a veces mandar todo a la “tostada” e inclusive los obstáculos y fallas, sacar la casta para que nuestro avión no se estrelle y explote.

Creo que nuestra vida es como pilotear un avión. Nosotros también hacemos ejercicios aerobáticos con nuestro avión. Nosotros también sentimos la calma y la fuerza sobre nosotros. También llegamos a sentir nuestro avión en picada, pero la experiencia hace que saquemos nuestro avión a flote cada vez. Invéntate razones para seguir con el entusiasmo de cuando empezaste (recuerda siempre por qué lo hiciste) y para sacar tu avión de una picada, si es que alguna vez lo sientes así.

Y para inspirarte, te dejo el video maravilloso que me hicieron los “hotties” de BLIJ Productions y si quieres ver las fotos, puedes verlas en esta galería: {FOTOS vuelo aerobático}

 

¿Tú te has sentido así? Cuéntame en los comentarios.

Melanie